Kerzhakov salva a Rusia del desastre

 

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Rusia 1-1 Corea del Sur

La Rusia de Capello y la Corea del Sur dirigida por Myungbo Hong acabó en un empate que deja a ambas selecciones con un punto en el grupo H, justo por detrás de Bélgica que ha sido la única en ganar un encuentro. En un partido muy igualado, Lee Keun-HO adelantó a los coreanos con la ayuda de Akinfeev que cometió un error garrafal al no atajar el brazuca y la leyenda viva de Kerzhakov puso el empate final.

Llegó el estreno de la gran Rusia, que ha vuelto a clasificarse a un Mundial tras dos ediciones de sequía. La selección dirigida por Fabio Capello tenía como rival a Corea del Sur, un equipo desconocido con jugadores de mucha calidad como Park Chu-Young (ex del Celta de Vigo) o Son Heung-Min, una de las estrellas del Bayer Leverkusen. Ambos conjuntos iban a completar la primera jornada del grupo H, el cual comparten con la selección de Bélgica que venció por 2-1 a la de Argelia, con remontada incluída.

El Arena Pantanal de Cuiabá iba a ser testigo de uno de los encuentros más igualables de los que llevamos de esta edición del Mundial. Los rusos salieron con un once lleno de jugadores procedentes de equipos moscovitas, mientras que la República de Corea salió con un equipo mezclado entre jugadores de ligas asiáticas y europeas. Como antecedente y un punto de similitud entre las dos selecciones, se encuentra en que el holandés Guus Hiddink entrenó a ambos conjuntos y en ambos triunfó.

El encuentro comenzó con el ligero dominio y las ganas puestas por Corea del Sur, que lentamente se acercaban a la portería defendida por Akinfeev. Chung Yong combinaba con Park una contra rápida que acabó por la línea de fondo. Era la octava edición del Mundial consecutiva de Corea del Sur, se notaba que tenían más experiencia que Rusia.

A pesar de ello, Rusia se vino arriba y se intercambiaron los papeles. Poco a poco, los rusos se acercaban a la portería rival, pero gracias a una buena defensa de Corea, el juego fue muy pausado y las ocasiones no fueron nada claras. El entrenador de la República Coreana Myungbo Hong, que fue el encargado de marcar el último penalti contra España (Mundial Corea y Japón 2002) tras el fallo de Joaquín, propuso a sus jugadores la regla de «defendemos todos y atacamos todos» y se la tomaron tan en serio que había momentos en los que 11 jugadores defendían en su campo.

La primera ocasión o mejor dicho, el primer tiro a puerta claro llegó desde una falta lejana, fue Sergey Ignashevich el que iba a tirar un cañonazo que iba a despejar Jung Sungryong. Seguidamente un tiro de Zhirkov iba a ser la segunda ocasión de Rusia. Mientras tanto, los coreanos, tímidamente, se acercaban a la portería rival por internadas. Mucho equilibrio entre ambos equipos. Fue Ja-Cheol el que tuvo una desde la frontal del área que le iba a dar esperanzas al conjunto coreano. Los últimos minutos de la primera mitad fueron claro ejemplo de tuya-mía, Rusia soltaba el balón y Corea del Sur jugaba con más tranquilidad. El equilibrio no dejo de lado a ninguno y se fueron con el resultado gafas al descanso.

Comenzó la segunda mitad y Rusia salió muy enchufada desde el principio, primero un tiro lejano que el guardameta coreano despejó a saque de esquina, y seguidamente un cabezazo de Berezutskiy que se fue por poco. Igual que en la primera parte, esta no iba a ser un monólogo de nadie y los coreanos se acercaron a la portería de Akinfeev. Myungbo Hong quería cambios y le dio minutos a Lee que entró en lugar de Park, el ex del Celta de Vigo y que esta temporada solo ha jugado 61 minutos en el Watford. Otra gran ocasión para Corea salió de las botas del central Kim de falta directa, el balón le botó a Akinfeev que no atajó ningún de los tres disparos seguidos del equipo coreano. La presión ejercida por los coreanos provocaban fallos defensivos en la zaga rusa. El partido estaba roto por completo. Y en una de ellas, Akinfeev iba a fallar.

En el minuto 68, Lee Keun-HO chutó desde fuera del área, tras un robo de la zaga coreana, y el guardameta ruso cometió un fallo garrafal al querer atajar el esférico, este se le escapó de las manos y les dio la ventaja a la República de Corea. No les iba a durar mucha la alegría a los coreanos, Fabio Capello tenía que dar aire fresco al equipo y dio entrada a Kerzhakov y a Denisov y acertó. Tan solo unos minutos después de entrar, la leyenda viva de la Rusia mundialista, Kerzhakov anotó el tanto del empate después de varios rechaces en el área Jung Sungryong.

Hasta el último instante lo intento Rusia, que tuvo más iniciativa que Corea del Sur que se conformaba con el empate. El partido fue ten igualado que el marcador no se movió y el encentro finalizó con el 1-1 con goles de Lee Keun-HO y Kerzhakov.

Jakub Wilmanowicz, @Kuba4pl