Baliza V16: una idea tan ‘deslumbrante’ como inútil 

La  Baliza V16 es la última ocurrencia de la DGT o mejor dicho una  brillante idea que solo deslumbra de cerca, porque de lejos  no se ve nada y menos de día, en curva o con mucho sol, es decir que La baliza V16,  está entre una irreal seguridad vial y mucha  confusión ciudadana

Debe ser que en la cartera que dirige el señor Pere Navarro, Director General de Trafico, debe de existir un departamento secreto en la administración dedicado exclusivamente a inventar formas nuevas y creativas de confundir al ciudadano y sacarle la pasta.

No sabemos dónde está ni quién trabaja allí, pero la baliza V16 demuestra que existe. Y que funciona a pleno rendimiento, otra cosa es su dudable fiabilidad.

Porque la V16 es, ante todo, una obra maestra del humor involuntario. Un dispositivo que nació para iluminar carreteras… y ha terminado iluminando, sobre todo, la falta de coordinación, claridad y sentido común de quienes la han impuesto.

Eso sí: si lo que buscaban era generar confusión, chapó. Excelencia absoluta.

Empecemos por lo básico: primero te dicen que compres una baliza. Pero solo una, ¿eh?, que esto es por tu seguridad. Luego se descubre que esa baliza no vale, que necesitas otra.

Pero no te preocupes, porque la primera sirve… aunque solo hasta una fecha concreta que nadie se molestó en explicar. Perfecto: ya tienes dos balizas que no sabes si usar, cuándo usar o si tirarlas a la basura y usarlas de pisapapeles.

Y cuando el conductor está ya con el estrés postraumático de tanta compra, cambio y contraorden, llega la guinda del pastel: la baliza conectada. Sí, sí, conectada.

Porque nada dice “tranquilidad” como un aparato obligatorio que transmite información en tiempo real a una plataforma que casi nadie entiende. ¿Datos anónimos? ¿Ubicación? ¿Alertas? ¿Señales al espacio exterior? No se sabe.

Y como nadie lo explica con claridad, pues cada cual imagina lo suyo. Total, imaginación es lo único que no han regulado… todavía.

La escena real es fácil de visualizar: un conductor en una gran superficie de automoción, mirando un pasillo lleno de balizas, recordemos que existen cerca de 200 modelos ‘homologados por la DGT’, como quien contempla exámenes de matemáticas en ruso. Modelos con pegatinas, sin pegatinas, con conexión, sin conexión, “preparada para el futuro”, “homologada según normativa cambiante”, “válida hasta julio, septiembre o cuando el legislador se acuerde”…

Es como intentar comprar leche sin lactosa en un mundo donde cada brik trae instrucciones distintas y ninguna coincide.

Pero no nos quedemos solo en la normativa.

El mercado también se lució: vendedores ofreciendo balizas “totalmente homologadas”, fabricantes prometiendo que su modelo cumpliría la normativa del futuro… una normativa que aún no existía.

Eso sí que es visión empresarial: vender el futuro antes de saber cuál es. Ojalá esa confianza para elegir pareja o hipoteca.

Y, mientras tanto, el ciudadano ahí, recogiendo balizas como si fueran cromos de una colección absurda. “¿Tienes la baliza V16 Conectada Ultra Premium 3.0?” “No, pero tengo la V16 Básica Provisional Plus que sirve hasta febrero, si la miras con cariño.”

Un desastre tan completo que solo falta que saquen una versión con luces de discoteca y música de fondo.

Lo irónico es que la idea original era buena. Buenísima. Salvavidas pura. Pero España tiene un don especial: coger una idea brillante y convertirla en una opereta. Y, en este caso, en una opereta iluminada intermitentemente y conectada a la DGT.

La baliza V16: una luz en la oscuridad… pero solo si hablamos de humor absurdo

Sin duda otra idea brillante del esquilador director del Ministerio del Interior…, pero, eso sí con el cachondeo de que  la DGT prevé ser flexible al inicio. 

Pero es por nuestra seguridad, si, si… para que no salgamos del coche, y pongamos desde dentro la lucecita en cuestión.

Y entonces para qué hemos tenido que comprar  los obligatorios  chalecos amarillos, los triángulos que había que poner a 100 metros del coche?…o sea que era mentira, ahora eso ya no sirve porque pone en riesgo el atropello, pero que un camión se lleve por delante nuestro vehículo, ‘debidamente iluminado con la superbaliza V16’ mientras esperamos el rescate eso si es seguridad .

Yo seguiré con mi chaleco y mis triángulos y si hay avería mantenerme  a una buena distancia del vehículo  averiado como el resto de Europa.