Majadahonda vive su fiesta tras el ascenso

@DarioNovoM

Cánticos, ilusión, bufandas, vecinos, lleno hasta la bandera y todo resumido en una sola palabra: felicidad. La felicidad de un municipio entero por el ascenso de su equipo, el de siempre, a Segunda División.

A las 19.00 de la tarde, con puntualidad, partía desde el Cerro del Espino de Majadahonda el autobús que ha conducido a los jugadores y el cuerpo técnico a la reunión con su afición. El mismo campo que les vio ascender era el pistoletazo de salida a una fiesta un tanto especial: logrado el objetivo, el equipo tendrá que jugar de nuevo este fin de semana para dirimir ante el filial del Mallorca quién se corona campeón de la Segunda División B.

Hoy, lo de menos era eso. Los jugadores, dentro del britanismo, hacían acto en la Gran Vía a las 19.30. El tiempo quiso sumarse a la fiesta y respetó con calidez y luz su llegada. Los comercios pararon por un tiempo su actividad y los vecinos salieron a las ventanas a aplaudir a sus nuevos iguales famosos, quienes han situado a Majadahonda en el mapa de España al que da cobijo el fútbol. Bendito fútbol.

El director deportivo, José María Movilla, esperaba junto al consistorio de traje, impoluto, como si los años no hubieran pasado por él. Elegante, el presidente Enrique Vedia recordaba en las escaleras de acceso a alcaldía aquellas veces que la afición le reclamaba el ascenso a Preferente. Años después, como en esas noches mágicas, los sueños se cumplen multiplicados por millón.

El alcalde, Narciso de Foxá lucía corbata y sonrisa. Fue saludando uno a uno a los jugadores y cuerpo técnico del Club escoltado por otras autoridades políticas municipales. Y no solo. Hasta allí también se acercó Álvaro Ballarín, viceconsejero de Cultura de la Comunidad de Madrid que hizo lo propio en una tarde en la que la política -a pesar de todo- fue lo de menos.

El momento

Las escaleras de acceso a alcaldía son, en caso de triunfo, automáticas. Nadie se quejó de la hora ni de subirlas. Era el momento que ha costado madrugones, enfados, entrenamiento, decisiones y goles en el 97. En un balcón enjuto, sobre el que colgaba una pancarta que rezaba enhorabuenas y un mensaje directo, ‘Sois muy grandes’, los protagonistas tomaron la palabra.

Fueron el Alcalde, el Presidente, los capitanes y todo aquel que quiso dirigirse a los que esperaban en la plaza: vecinos, amigos, familiares, Majadahonda. La voz en estos casos se hace difícil de corresponder y la aclamación popular inicia cánticos suyos, dirigidos a los que están arriba. Paradojas del fútbol humilde hacen pensar cuántos de los que poblaban hoy la plaza habrán visto a través de sus balcones jugar a estos chavales que hoy son ídolos de los más pequeños y orgullo de los mayores. El magnífico mundo al revés.

Tras los agradecimientos en el Salón de Plenos, la fiesta continuó. O comenzó. Son, desde hoy, 365 días de fiesta, una Liga por delante y las que pueden ser. Si el pasado domingo lograron el ascenso, desde hoy, Majadahonda, es de Segunda.

Imagen: @ChemaBueno1