Foto CN/ Chema Bueno

La conducción en invierno y como evitar accidentes

Casi uno de cada cuatro choques de vehículos relacionados con la meteorología está involucrado en carreteras con nieve, aguanieve o hielo. Y es que el invierno comporta cambios de las condiciones climatológicas que afectan directamente a la conducción.

El invierno trae consigo unas especiales  condiciones climatologías extremas que aumentan los peligros en la conducción. El viento, la lluvia, la niebla, el hielo o la nieve provocan que conducir en invierno sea más difícil, obligándonos a tomar una serie de precauciones o cuidados en la conducción.

 Existen estudios entre  que indican que más del 30% de accidentes graves se producen en esta estación del año. Para ayudar a una conducción más segura os damos 10 consejos básicos.

  Distancia de seguridad

En caso de lluvia, niebla, nieve o hielo, es recomendable aumentar la distancia de seguridad con el vehículo que nos precede, en caso de cualquier incidencia tendremos más margen de reacción y podremos evitar el accidente o que reducir sus consecuencias.

  Reducir velocidad y marchas largas

Especialmente cuando la calzada esta mojada o extremadamente húmeda, aumenta el deslizamiento poniendo en peligro nuestra seguridad. Para evitar cualquier pérdida de tracción es aconsejable reducir la velocidad y utilizar marchas largas siempre que arranquemos, poner segunda en lugar de primera, para evitar que el coche derrape. A parte de utilizar neumáticos adecuados.

 Evitar frenazos bruscos

Hay que intentar conducir de forma suave, especialmente con el suelo mojado, nieve o hielo, esto nos ayudara a que nuestras ruedas se bloqueen y evitaremos colisiones con el vehículo que nos sigue. Lo ideal es utilizar el freno motor y presionar el freno lo menos posible.

 Precaución con los adelantamientos

Al realizar un adelantamiento tendremos que acelerar y aumentar la velocidad, tendremos que maniobrar para adelantar al vehículo que nos precede, lo que ya supone un riesgo, a esto se añade la falta de visión y el comportamiento de los otros conductores que puede ser menos predecible.

 Cadenas y  neumáticos  de invierno

Si vamos a conducir en invierno es indispensable llevar los equipamientos necesarios, sino mejor no salir. Hay que llevar ruedas de invierno o cadenas. Las cadenas además de llevarlas hay que saber colocarlas, para ello se aconseja previamente ensayas poniéndolas en casa, para comprobar su exacto montaje. Hay que conducir de forma suave y no superar los 50 km/h. Cuando haya desaparecido la nieve de la calzada debemos acordarnos de retirarlas.

Equipo mínimo indispensable

Cuando salimos a la carretera en invierno debemos de llevar un mínimo de equipo, como linterna, móvil cargado, deposito combustible lleno, agua, algo de comida, ropa de abrigo, manta térmica y un pequeño botiquín.

 Infórmate antes de salir

Es muy importante consultar tanto las condiciones de las carreteras como las previsiones meteorológicas. Ello nos ayudara a evitar o estar preparado ante posibles problemas.

  EL descanso es imprescindible

Aumenta el número de paradas en invierno. La conducción en invierno requiere más atención y tensión. Es recomendable hacer más paradas de las habituales y descansar.

  Atención especial  a la climatización del vehículo

La temperatura dentro del vehículo debe ser agradable, pero sin llegar a ser excesiva ya que puede ayudar a producir insomnio. De la misma forma hay que conducir con prendas cómodas y no conducir con abrigos o anoraks puestos. La vestimenta debe ayudar a facilitar los movimientos no a impedirlos.

  Verificar el  tipo de póliza de seguro

Antes de salir comprobar que tipo de asistencia en carretera tenemos contratada y tener a mano y actualizado el teléfono de asistencia de nuestra compañía de seguros. En invierno elementos como la batería sufren mucho y se desgastan antes.