Begoña Valderrama, en el centro de la imagen, junto a sus compañeras.

Una roceña, entre las expedicionarias que participarán en el Reto Annapurna Bike

Begoña Valderrama, de 45 años y residente en Las Rozas, es una de las cinco expedicionarias que participarán en el Reto Pelayo Vida Annapurna Bike 2018, en el que recorrerán 300 kilómetros en bicicleta a una altura de más de 4.300. Junto a ella viajarán Gemma Fernández (Madrid), Lorena Fernández (Cartagena), Cecilia Bona (Zaragoza) y Noelia Galán (Terrassa). Las cinco mujeres han sufrido y superado el cáncer de mama.

«El cáncer te convierte en alguien muy fuerte, en una ‘Super Woman’. Parece que puedes con todo lo que quieras hacer. La clave está en el equipo», explicó Begoña Valderrama. Comparándolo con el desafío que tendrán que afrontar en el valle nepalí, no duda de que la enfermedad «es el verdadero reto, un desafío que te obliga a luchar». Pero, tanto en este reto como para enfrentarte a esta enfermedad, lo importante es «rodearte de un equipo, igual que con los médicos, la familia y los amigos para que el éxito esté asegurado», comentó la roceña.

«Hace seis meses no las conocía de nada y ahora son mis hermanas. Me han enseñado mucho, cada una de nosotras tiene detrás una historia y a veces las escucho y digo: ¡No tengo derecho a quejarme! Están siendo todo cosas buenas y positivas», afirmó Begoña sobre sus inseparables compañeras de reto.

Las supervivientes del cáncer esperan dar un «un mensaje de esperanza y superación y ser un altavoz» en su viaje al valle nepalí del Annapurna donde recorrerán, a partir de noviembre, 300 kilómetros en bicicletas de montaña a más de 4.300 metros de altitud cubriendo la distancia que separa las ciudades de Pokhara y Lo Manthang, capital del reino prohibido de Mustang, un desafío «muy duro» para apoyar la lucha contra esta enfermedad.

Estas cinco mujeres, elegidas entre las 250 supervivientes del cáncer de mama que se presentaron al reto, serán las protagonistas de la cuarta edición del Reto Pelayo Vida, que discurrirá por los parajes de uno de los 14 ‘ochomiles’ del planeta. En las tres anteriores, las elegidas tuvieron que ascender el Kilimanjaro, cruzar el Océano Atlántico en vela o andar por el Artico a 54º bajo cero.