Peligra Sevilla

Las actuales medidas sanitarias de la Junta de Andalucía hacen inviable económicamente la celebración de la feria taurina en Sevilla. O bien se aumenta el aforo en La Maestranza de Sevilla o todo apunta a que el desastre está servido.

El Gobierno regional esgrima la última disposición del Boletín Oficial del Estado: Se deberá asegurar que se adoptan las medidas necesarias para garantizar una distancia interpersonal mínima de 1,5 metros, así como el debido control para evitar las aglomeraciones. Cuando no sea posible mantener dicha distancia de seguridad, se observarán las medidas de higiene adecuadas para prevenir los riesgos de contagio y así lo recoge el diario ABC, en el que se recoge además que esa petición del 50 por ciento del aforo no parece ser un capricho de la empresa Pagés, como dejan caer desde la esfera política, sino el mínimo que evitaría la quiebra del espectáculo. Si la Plaza de Toros de Sevilla abre sus puertas con el metro y medio de distancia entre espectadores sólo podría recibir el 12 por ciento del total, por lo que no alcanzaría ni las 1.500 personas de las que hablaba Ramón Valencia hace unas semanas.

Ese 12 por ciento son 1.362 espectadores, lo que supone unos ingresos en la taquilla de 90.000 euros por cada corrida, según desveló el propio Valencia en el programa Los Toros a la cadena Ser. Según ha podido conocer este periódico, únicamente el coste de apertura de la Real Maestranza supera los 50.000 euros por corrida (trabajadores, cuadra de picar, areneros, mulillas, cabestros, etcétera), cantidad a la que habría que sumarle los gastos de producción, que en el aspecto ganadero supera los 40.000 euros. Así las cosas, solamente en logística y en el ganado ya se sobrepasarían los ingresos de la taquilla. Y después habría que añadir costes de importancia como los honorarios de los toreros, el canon de la plaza, etcétera.

«Mucho me temo que esa distancia (cincuenta por ciento del aforo) no se va a cumplir y que la empresa Pagés tendrá que acatar esta nueva directriz del Gobierno», exponía el vicepresidente, Juan Marín, en los micrófonos de Radio Sevilla.

Por otra parte, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, advirtió este lunes de que ‘la ley es para todos’, por lo que, pese a que le gustaría ‘poder aumentar el aforo en las corridas de toros, la pandemia impone unas circunstancias muy complejas, muy difíciles y la salud tiene que prevalecer por encima de cualquier actividad’. Así, no prevé hacer la excepción con los festejos de reducir la distancia de seguridad.

‘A mí lo que me gustaría es poner la plaza a reventar, entiendo que para los empresarios es un problema para la rentabilidad de los festejos, pero desgraciadamente, salvo que el Comité de Expertos o por parte de las autoridades sanitarias nos den una instrucción, ahora mismo la norma tenemos que cumplirla todos’, comentó en declaraciones a los periodistas en un acto en Sevilla, tras ser preguntado por la solicitud de la empresa Pagés para que La Maestranza aumente el aforo hasta el 50% para las próximas corridas, que son del 18 de abril al 2 de mayo.

Moreno ha recordado que, igual que se ha vivido una final de la Copa del Rey de fútbol y ha estado el estadio vacío, ‘la salud tiene que prevalecer por encima de cualquier actividad’. Así pues, aunque ‘estamos fuera de cualquier duda este Gobierno en cuanto a la atención que le estamos prestando a los festejos taurinos y el compromiso que hemos mostrado con la Fiesta Nacional‘, también es verdad que ‘hay una ley y hay que cumplirla, es para todos’. En este sentido, ‘la ley marca un distanciamiento de metro y medio y eso lo tenemos que cumplir en todos y cada uno de los rincones’, concluyó.

Ahora bien, la vara de medir vuelve a ser muy exigente con el sector taurino donde se exigen escrupulosamente cumplir todas las medidas y por el contrario otros actos culturales no las cumplen de manera tan estricta. El sector taurino no puede permitirse permanecer callado o el desastre esta servido por segundo año consecutivo.